Pazo de San Mauro

Pertenece al grupo Marqués de Vargas, que también elabora vinos con D.O Rioja y Ribera del Duero.

Compartir: 

Denominación de origen: 

Web: 

Email:

Dirección: 

Descripción general:

La bodega Pazo de San Mauro es una bodega con D.O Rías Baixas que pertenece al grupo Marqués de Vargas. El mismo presume de elaborar vinos también con D.O Rioja y Ribera del Duero. En la actualidad, Pazo de San Mauro, cuenta con dos vinos en su oferta de productos:

Historia:

El pazo de San Mauro, propiedad en su origen de la noble familia hispano-portuguesa de los Pereira de Castro, descendientes del rey Sancho I de Portugal, fue construido en el año 1591. El cultivo de la viña siempre estuvo unido a su historia, como atestiguan los restos del viejo lagar que pueden verse en su construcción, que dan fe de que ya en el siglo XVI se elaboraba vino.​

En el año 2003, Bodegas y Viñedos del Marqués de Vargas adquirió este pazo histórico de 30 hectáreas en Rías Baixas, en la escogida subdenominación del Condado de Tea.

Instalaciones:

Situado en Salvaterra do Miño, a la ribera del río, se encuentra el Pazo que preside la finca y da nombre a la bodega. Desde su adquisición se han acometido en él grandes inversiones, tanto en la restauración de sus nobles edificios como en la construcción de una nueva bodega dotada con la última tecnología para la óptima elaboración del vino.

​Viñedos y suelo:

La bodega se encuentra en el Condado de Tea, la zona más meridional y soleada de la Denominación Rías Baixas, con un microclima excepcional de influencia atlántica, que se caracteriza por temperaturas suaves y abundantes lluvias, además de contar con las horas necesarias de sol óptimas para que las uvas de los viñedos del Pazo de San Mauro alcancen una maduración más completa y temprana. 

Además, una característica especial es el suelo granítico de la finca, geológicamente antiguo, que aporta a los vinos su carácter complejo y mineral.

Con más de 40 años de edad, los viñedos del Pazo de San Mauro se extienden en una finca de 30 hectáreas sobre bancales de canto rodado en la ribera del río Miño, creando un anfiteatro natural y envolviéndolo con su magia y misterio. Las cepas están plantadas en semiparras para que los frutos, de producción muy restringida, crezcan en condiciones óptimas y alcancen la máxima calidad.

El suelo, arenoso en la ribera y de canto rodado en las laderas y zonas altas, permite el cultivo óptimo de las diferentes variedades de vid y, aunque la mayor parte de las cepas son de Albariño, también hay plantaciones de otras variedades como Loureiro, y Godello.