Godeval ha reunido esta semana en Santiago de Compostela a prescriptores, hosteleros y medios de comunicación, entre otros actores del sector, para presentarles «una pequeña joya», su nuevo Godeval 1986, con crianza en barrica de roble francés y posterior crianza con sus propias lías.
Una elaboración nacida para compartir «una nueva expresión del godello», en la que «las principales características de esta variedad noble, de moda en todo el mundo, se ensamblan con las notas que aporta la madera para convertirlo en un gran vino de guarda».
Con una producción limitada de solo 900 botellas, la llegada al mercado de esta elaboración encaja en la apuesta de la histórica de Valdeorras por la diversificación y la excelencia de sus vinos.