La bodega de O Condado As Laxas presentó ayer su nuevo proyecto Viñas Singulares As Laxas en un acto exclusivo celebrado en el incomparable entorno del Gran Hotel Nagari de Vigo y al que asistieron miembros de la hostelería, la distribución de vinos o la prensa especializada de toda la comunidad así como la directora de Industrias Agroalimentarias de Galicia, Belén do Campo, el delegado de la Xunta en Vigo, Ignacio López Chaves, o los alcaldes de Arbo, Crecente, Cañiza y As Neves, entre otros.
Una colección de edición limitada y compuesta por tres vinos de pago 100% albariño que muestra toda la versatilidad de la variedad reina de la D.O. Rías Baixas. Bautizados con el nombre de las fincas en las que nacen las uvas con las que son elaborados, O’Pucha, Tixosa y Pontecabaleiros son el resultado de un trabajo de casi media década y representan así el compromiso de la bodega con la elaboración de vinos de calidad, el respeto por el entorno natural y la puesta en valor de la variedades autóctonas.
Tras haber sido ya pionera en la apuesta por los vinos de tipo Condado o los espumosos, la bodega da ahora un paso más con Viñas Singulares As Laxas, en los que las posibilidades del albariño y la fidelidad al terroir se erigen como grandes protagonistas en tres elaboraciones de finca. Botellas que, en palabras del director gerente de Bodegas As Laxas, José Simón Ferro, “recogen lo esencial de cada finca; con mimo, dedicación y profesionalidad, hasta conseguir hacer singular lo singular”.
Así lo aseguró en un acto en el que tampoco faltaron representantes de la D.O. Rías Baixas como su vicepresidente, Ramón Huidobro, y que culminó con la cata dirigida y maridada de estas referencias.
LOS VINOS
Los asistentes degustaron primero Pontecableiros, una elaboración emblemática de lo varietal, con toda su amplitud y sin perder nunca su frescura que nace a partir de viñas de veinte años de antigüedad elevadas a tan sólo a 80 metros de altura del nivel del mar. Fresco y afrutado gracias a una maceración lenta de dieciocho horas y una fermentación espontánea sobre sus propias lías, es ideal, aseguran desde la bodega, para el que busque el auténtico sabor del albariño.
La finca O’Pucha es, tal vez, la más emblemática de Bodegas As Laxas. De ella se extraen las uvas para producir uno de los vinos más afamados de la firma: Bágoa do Miño. Gracias a esta experiencia, explican desde As Laxas, se ha podido profundizar un poco más buscando un vino que potencie las excepcionales características de este viñedo caracterizado por su terreno en terrazas de suelo granítico, sus viñas de más de 40 años y su excelente orientación al sur.
Empleando sólo las uvas de las terrazas más altas de este viñedo (las de menor producción, pero las más ricas en polifenoles y compuestos aromáticos) nace así O’Pucha: un vino lleno de aromas y con una mineralización muy marcada.
Finalmente, Tixosa, con una elaboración diferenciada en dos fases —fermentación en un depósito de acero inoxidable y posterior crianza de unos diez meses con batonnage—, es un vino potente en acidez y bajo pH, un vino con longevidad que nace de las uvas de la finca más elevada de las que posee la bodega, con viñedos de 30 años de antigüedad y a una altura de 350 metros sobre el nivel del mar, orientados al sureste.
La colección, que presenta las tres botellas en un único estuche, ha sido pensada para ser consumida de forma conjunta, de forma que el cliente pueda apreciar todos los matices del albariño. Una caja de tres botellas que recoge, en definitiva, toda la versatilidad de la variedad reina de la D.O. Rías Baixas.