La calidad y el gusto por el albariño está de moda en medio mundo, y parece que continuará yendo a más con el paso de los años, por lo que desde las bodegas de O Salnés no quieren perder la oportunidad de demostrar al mundo su buen hacer.
Desde su origen, Terras de Lantaño ha ido creciendo y evolucionando, modernizando sus instalaciones y adaptándose a los nuevos tiempos, apoyando siempre a su tradición, su gente, su tierra y su cultura para obtener los mejores resultados. El crecimiento del 25% en sus exportaciones en sólo dos años y el aumento de sus viñedos propios hasta sobrepasar las 20 hectáreas dan buena prueba de la imparable trayectoria de la bodega.
Una muestra más de su éxito es el Oro obtenido por su albariño Viña Cartín en el Concurso Internacional de Vinos Bacchus. Combinando origen e innovación para obtener un blanco fresco, moderno y de calidad, Viña Cartín ha sido diseñado para conquistar a públicos de todas las edades, como demuestra su etiqueta vintage, toda una declaración de intenciones. Parte de su producción pasa por un proceso de maloláctica con el que se bajan de forma natural los niveles de acidez, logrando así un blanco afrutado, armonioso y estructurado.
El premio de Viña Cartín representa sólo la última prueba de cómo el compromiso con el terroir y el saber hacer de Terras de Lantaño suma y sigue tanto en los mercados internacionales como en los más prestigiosos certámenes del sector.
Una de los puntos fuertes de la bodega son sus viñedos, en los que cultivan una única variedad, el albariño, con una combinación de diferentes altitudes, latitudes, exposiciones, edades y sistemas conducción, que dan como resultado unos vinos propios e inconfundibles.