“El vino es apetito visual, exceso, placer…”

Rut Martínez López, directora de Lapis de Buxo, nos cuenta los detalles del I Encuentro de Pintar con Vino, celebrado en Vigo

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​Texto: María Bueno

Ocurrió en un bajo de la Calle República Argentina de la Ciudad Olívica. Allí, el pasado viernes, el vino dejó de ser una bebida para convertirse en una herramienta artística; salía así de las copas y pasaba a deslizarse en papel de acuarela. “Apetito visual, exceso, placer”. Un elemento cargado de simbolismo y también un material “excepcional” para pintar.

Así lo asegura Rut Martínez, propietaria de la escuela de Bellas Artes Lapis de Buxo, donde tuvo lugar este I Encuentro de Pintar con Vino, y quien considera “apasionante” cómo este alimento “fluye en el papel, cómo se oxida y modifica” con el paso del tiempo, dando lugar a “tonalidades preciosas”: agranatados, en un caso, y blancos rotos, en el otro.

Inspirada en el movimiento artístico de los 60 Eat Art, la jornada contó con la participación de 20 amantes de la pintura. Entre ellos, alumnos de la escuela pero también destacados nombres del panorama artístico gallego como Javier Tena, Nuria Lago, María José Pulido, Antonio Abad, Angeles Jorreto o Sergio Cobelo.

Tampoco Abel Barandela​, conocido ya como el pintor del vino por la prensa de la comunidad, quiso perderse esta jornada “experimental” e “interesante”, en la que, del “juego con las texturas y densidades de los vinos”, se han obtenido grandes frutos: obras de “gran calidad” que pronto serán expuestas, según ha asegurado el propio a pintor.

LA EXPOSICIÓN

El dónde y el cómo nos lo cuenta Sara Bello, propietaria de la galería de arte viguesa Apo’strophe Sala de Arte, donde dentro de aproximadamente 10 días podrán contemplarse los resultados de una jornada que ha sorprendido a sus propias organizadoras y en el que todo el mundo, nos dice Martínez, “se ha quedado encantado”.

El encuentro ha servido así para establecer vínculos entre los artistas, quienes destacaron lo “maravilloso” de la iniciativa, “un modo de aprender y enriquecerse”, dijeron “viendo cómo trabajan otros colegas de profesión con la misma materia”.

Para la puesta en marcha de esta iniciativa, Lapis de Buxo contó con la colaboración y el patrocinio de la bodega con D.O. Ribeiro Leive​, quien proporcionó cinco tintos y cinco blancos a la escuela de Bellas Artes.

Así, sus referencias no podían faltar en la exposición que pronto acogerán las instalaciones de Apo’strophe en Plaza Elíptica, donde su degustación se acompañará de tapas de jamón y donde, una vez más, vino y arte maridarán para disfrute de los asistentes.

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