Recientemente, más de 200 profesionales de la Enología han coincidio en el tiempo y en el espacio en nuestro país. Una oportunidad única para medirle el pulso a un sector que insiste en el origen a la hora de mirar al futuro: Si el cuidado de las materias primas centra los trabajos de investigación actuales, el relevo en el consumo marca la pauta de debate.
La ciudad de Palencia acogió el pasado fin de semana el XVIII Congreso Nacional de la Federación Española de Asociaciones de Enólogos (FEAE). Conferencias y charlas técnicas de “altísimo nivel” se sucedieron durante los días del evento bianual, en el que no faltó la representación autonómica de la mano de la Asociación Gallega de Enólogos (AGE).
Era esta “una gran ocasión para intercambiar conocimientos, hacer nuevos contactos o reencontrarse con colegas pero, sobre todo, para seguir aprendiendo”, valora Luis Buitrón. Presidente de la AGE y vicepresidente de la FEAE, destaca también la enorme afluencia de asistentes al evento, que “aumentan con cada edición”.
Las ponencias que “llenaron” de profesionales el anfiteatro de la Universidad de Palencia giraron así en torno a dos grandes temas. En materia de elaboración de vinos, la madera y el oxígeno acapararon el protagonismo pero lo cierto es que: si hubo un tema estrella en el congreso, ese fue el del viñedo y sus cuidados.
A lo que ya estaba “clarísimo” y esto es: “Si no partes de un buen trabajo en la viña, poco o nada puedes hacer”, se han unido ahora y entre otros factores cambios en la legislación europea que restringen el uso de tratamientos fitosanitarios, lo que redunda “en la búsqueda de alternativas para lograr una viticultura lo mas ecológica y lo menos agresiva posible”.
Así se pudo sentir en la cita. Patricia Presas, vocal en la directiva de la AGE, responde al ser preguntada por la temática predominante en el evento: “Uva, uva y uva… El hacer de verdad el vino desde el fruto, que no sea solo una panacea; evitar las enfermedades de la vid, proteger la materia prima y respetar el medio ambiente. Hay muchísima investigación en torno a estos temas”.
Buitrón, por su parte, destaca en este sentido la intervención del enólogo francés Pascal Chatonnet durante las jornadas, centrada en el “Papel del microbioma del suelo vitícola y su posible influencia en la composición y calidad del vino”, y habla del origen de la vida de la vid como método de prevención.
*Foto: Luis Buitrón o Patricia Presas, entre los miembros de la Asociación Gallega de Enólogos (AGE) presentes en el Congreso Nacional. // AGE
El relevo en el consumo, la preocupación “de siempre”
Entre charla y charla, se habló también de otro de los grandes nichos de preocupación del sector: el relevo en el consumo. “Pues sí, el tema preocupa”, dice el presidente de la AGE, que añade: “Somos el primer país en superficie de viñedo, el segundo o el tercero en producción según el año pero no estamos ni entre los 15 primeros puestos del ranking en consumo por persona.”
“Hay que inculcar el consumo moderado de vino, una bebida natural, en lugar de destilados de mala calidad”, concluye el enólogo y deja paso a Presas: “Es un asunto de precios y también cultural”, explica la enóloga sobre el tema “de siempre” que, como tal, no podía faltar en la cita.
Variedades como brancellao o sousón, en la punta de lanza
Un evento en el que los gallegos pudieron comprobar una vez más el interés que despierta el vitivinícola de la comunidad y es que, no en vano, dice Buitrón, “es un punto de referencia a nivel nacional e internacional gracias a sus variedades de uva”.
“Siempre sale el comentario de godello, albariño, treixadura o mencía… Pero, últimamente, empieza a hablarse también de uvas como brancellao o sousón, ya en la punta de lanza”, se despide el enólogo.