Texto: Arousa
Uno de los asuntos que más preocupa este año a los viticultores no es la posibilidad de que les llueva en el peor momento, sino el de encontrarse con un nido de avispas velutinas o, lo que aún es peor, molestarlas sin darse cuenta y exponerse a un ataque de los insectos. El riesgo es tal que incluso la Estación Fitopatolóxica do Areeiro avisó de que ya se han reportado casos de racimos de Treixadura dañados por la avispa, y avisan a los viticultores de que tomen cuantas medidas preventivas consideren necesarias para evitar las picaduras.
Algunos expertos recomiendan a los viticultores acudir al campo provistos con inyectables de adrenalina para contrarrestar los efectos de una eventual picadura, ya que los nidos pueden aparecer en los lugares más insospechados.
Los técnicos de la Mancomunidade do Salnés que participan en el programa de eliminación de los nidos también aconsejan no hacer ruido ni aspavientos. Este equipo está retirando una media de 14 colmenas diarias, algunas de ellas de lugares tan insólitos como la parte inferior de un fregadero, entre las tejas y el falso techo de una casa, en el mástil de un velero, en embarcaciones que están en tierra, en taludes y enterrados bajo el suelo.
Y aunque lo más habitual es que nidifiquen en árboles como, es también frecuente que se sitúen en parras y viñas por lo que supone un riesgo para los trabajadores del campo, en especial para los agricultores que emplean desbrozadoras o los que acudan a la vendimia.
«Aunque no es cierto que la avispa asiática sea especialmente agresiva si se las molesta atacan y su picadura es muy dolorosa; lo digo por experiencia personal», explicó en su día uno de los técnicos de la Mancomunidade, y miembro de una de Protección Civil.
«Aunque ya hay nidos de gran tamaño, la mayor parte son como una pelota de baloncesto y pueden pasar desapercibidos», explicó, para añadir que la picadura de estos insectos es «bastante molesta». En el caso de que solo ataquen una o dos avispas, el mejor remedio «es el amoníaco y el hielo para reducir la inflamación», explica. Pero puede ocurrir que una persona sufra la picadura de varios miembros del enjambre por lo que la situación puede ser grave; de ahí que la inyección de adrenalina sea lo más recomendado en el primer momento. Cabe recordar que en Galicia han fallecido este año al menos dos personas por las picaduras de estos insectos.